Como ya sabéis los más pequeños del cole han estado conociendo en profundidad el desierto del Sahara.
Todo comenzó a la vuelta de Navidad, cuando nos encontramos un dromedario en la clase y el mensaje del pirata barba negra que se encontraba en el desierto del Sahara. Él nos pedía nuestra ayuda para saber más de ese misterioso lugar.
Así que los niñ@s, con ayuda de sus familias, buscaron información sobre este lugar y más en concreto sobre: las plantas, los animales, las personas que habitan y sus costumbres.
Muy ilusionados con sus descubrimientos lo expusieron a sus compañeros.
Queremos agradecer desde aquí toda la colaboración de las familias por los trabajos.
Decoramos la puerta con los colores y formas de esa cultura, también en trabajo cooperativo, con el que disfrutamos tanto... También, llenamos el pasillo con unas lámparas maravillosas.
Y no podía faltar la vivienda típica, ¡la jaima! Así que en un rincón de la clase instalamos una jaima, con una alfombra a la entrada y cojines. ¡Lo han disfrutado muchísimo! Los pañuelos los pusimos a modo de turbante. Tomaron el té compartido. Este, sin lugar a dudas, ha sido un rincón favorito, donde han dado rienda suelta a su imaginación.
En el aula de psicomotricidad hemos jugado a ser palmeras, escorpiones, dromedarios e incluso cáctus.
En estos días también hemos empezado a jugar y cortar con las tijeras, hemos empezado a conocer, discriminar y repasar la letra I y el número 3. También, los niños y niñas han aprendido una poesía que dice así:
“La A sentada está,
La E se pone de pie,
La I se va a dormir,
La O un brinco dio,
Y la U tururú.”
Hemos bailado con la canción de “Sahara eo,eo” y con “Oh señor sol”
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